Desarrollos en estados vecinos pudieran beneficiar en el corto plazo a la saturada carretera 57, por la que circulan al día más de 50 mil vehículos
Cinco concesiones carreteras podrían agilizar la vía México-Querétaro y beneficiar, también, al resto de las poblaciones de El Bajío.
El beneficio buscado es desahogar el tráfico de los más de 50 mil vehículos que circulan diario por la carretera federal 57, donde parece que las obras nunca terminan.
Hacia el Estado de México, está la carretera Atlacomulco-Acambay, parte del Arco Norte, además de un tramo que va desde la carretera Apaseo-Palmillas, que conectará Acambay con el macrolibramiento de Querétaro. A través de esta conexión se podrá acceder por un lado a la ciudad de Querétaro, y por el otro continuar hacia Celaya y otras ciudades de Guanajuato.
Por otra parte, la conclusión de la carretera estatal 413, una de las promesas de campaña del gobernador elector de Querétaro, Mauricio Kuri, conectaría la capital queretana con el macrolibramiento en su entronque con Coroneo. Lo anterior potenciaría la actividad industrial del sur del Estad.o